¿Tu alfombra está sucia y quieres meterla a la lavadora, pero te asusta la idea de que se pueda dañar en el proceso? Entonces, ¿cómo lavar una alfombra en la lavadora? Aquí responderemos esa inquietud y determinarás si tu alfombra es apta para lavado a máquina.

Descubre lo que se debe y no se debe hacer para lavar alfombras con esta guía completa. Ya sea que tengas una alfombra pequeña o grande, te ayudaremos a lograr resultados óptimos sin comprometer la calidad y la textura de tu tapete favorito. 

¡Empecemos! 

¿Se puede lavar una alfombra en la lavadora?

Sí, se puede lavar una alfombra en la lavadora, siempre y cuando esta sea pequeña y de un material resistente a la máquina. En cambio si se trata de una grande y pesada, no hay garantía de una limpieza eficiente y su textura puede desgastarse más rápido de lo normal. 

Ahora bien, en caso la etiqueta de tu alfombra admita lavado a máquina, es importante preparar las condiciones para que no se afecte la calidad de su fibra, y para que la lavadora no sufra una posible sobrecarga o acumulación de residuos que puedan acabar en el filtro. 

¿Cómo lavar una alfombra en la lavadora?

Para lavar una alfombra en la lavadora, primero revisa la etiqueta de cuidado, después sacúdela hasta sacar todo el polvo y, si notas manchas difíciles, aplica un producto quitamanchas. Luego, mete la alfombra a la lavadora y trata de equilibrar la carga con otra de su mismo tamaño. Finalmente, seca las alfombras al aire libre. 

Sigue estos pasos para lavar la alfombra en la lavadora:

  1. Revisa la etiqueta 
  2. Sacude la alfombra
  3. Aplica quitamanchas  
  4. Mete la alfombra a la lavadora y equilibra la carga  
  5. Programa en ciclo delicado 
  6. Seca la alfombra al aire libre 

A continuación una explicación detallada de cada paso. 

1. Revisa la etiqueta

Las etiquetas de cuidado brindan instrucciones sobre si la alfombra se puede lavar a máquina, la temperatura del agua, si es conveniente aplicar secadora y cualquier precaución adicional. Seguir las pautas de la etiqueta de cuidado garantiza que el tejido no sufrirá ningún daño durante el proceso de limpieza.

Si ignoras los métodos de limpieza recomendados por el fabricante, puedes deteriorar la calidad de la fibra y también producir daños a la lavadora. Por eso, antes de meterla a la máquina, primero asegúrate de conocer los cuidados básicos que requiere. 

Una vez dicho esto pasamos a resolver esta inquietud: “¿qué pasa si lavo mi alfombra en la lavadora?”. No pasa nada malo si previamente has seguido las instrucciones de lavado de la etiqueta y si tomas en cuenta los demás consejos que vamos a darte. 

2. Sacude la alfombra 

Es momento de sacudir la alfombra al aire libre para eliminar todo el polvo acumulado. En este proceso es posible que notes que has dejado mucho tiempo pasar y que están más sucias de lo que pensabas. Ahora, ¿cómo se limpia una alfombra muy sucia? 

Después de sacudirlas contra la pared, para asegurarte de que no quede ningún residuo, pasa la aspiradora en la superficie y localiza las manchas difíciles.

Es importante hacer esto porque la alfombra, al no ser un revestimiento aseado con frecuencia, suele convertirse en un foco de ácaros. A ello hay que sumarle la pelusa de gato, arenilla, restos de comida, polvo, chicles, malos olores y otros residuos indeseados. 

3. Aplica quitamanchas 

Con un producto quitamanchas puedes maximizar la limpieza. Aplica sobre aquellas zonas donde, por ejemplo, se hayan derramado accidentalmente guisos, jugos, vinos, tengan huellas de gato o perro. Después frota con un paño humedecido de bicarbonato de sodio o pasa un cepillo dental viejo. Toma en cuenta si la etiqueta de cuidado lo autoriza.

4. Mete la alfombra a la lavadora y equilibra la carga  

Es importante saber cuántos kilos puede soportar tu lavadora antes de meter la alfombra. Como regla básica debes dejar entre un 20 y 30 % de espacio de su capacidad real. Por ejemplo, si tu lavadora soporta una carga de 8 kilos, entonces debes agregar 6 kilos. 

En el caso de las alfombras, muchas suelen ser pesadas y de gran tamaño. Pero como ya sabes que de preferencia solo debes meter aquellas que sean pequeñas, equilibra la carga incorporando al tambor otra más y sin llegar al tope de lo mínimo recomendado. 

5. Programa en ciclo delicado 

Opta por un ciclo delicado y agua fría, pues el agua caliente puede encogerla o decolorarla. Asimismo, evita químicos agresivos como la lejía. De preferencia usa detergente líquido para evitar que queden grumos azules tras el centrifugado. 

6. Seca la alfombra al aire libre 

El mal manejo del proceso de secado puede provocar moho, hongos y daños en las fibras de la alfombra. El método más seguro es secar la alfombra al aire libre. Cuélgala sobre un tendedero resistente, evitando la luz solar directa. 

¿Te preguntabas cómo lavar una alfombra? Ahora ya sabes que tienes tres opciones: lavado a mano, a máquina o enviarla a una lavandería. En los siguientes párrafos veremos qué hacer en caso de que sean alfombras de tejidos delicados. 

¿Qué tipos de alfombra se pueden lavar en la lavadora?

Las alfombras hechas de algodón, poliéster y mezclas sintéticas suelen ser seguras para el lavado a máquina. Estos materiales pueden soportar la agitación y la presión del agua de la lavadora sin dañarse. Sin embargo, los materiales delicados como la seda o la lana, deben ser lavados a mano para evitar posibles daños.

¿Se puede lavar una alfombra de yute en la lavadora? 

No, no se puede lavar una alfombra de yute en la lavadora porque al estar hecha de una fibra natural y sedosa se puede estropear muy rápido. Debe ser lavada a mano, con un jabón neutro y agua fría. Sin secadora. 

¿Cómo lavar alfombras de alpaca? 

Las alfombras de alpaca no deben ser lavadas en lavadora, sino a mano. Para quitar manchas, bastará con frotar la suciedad con un paño humedecido de solución jabonosa y luego pasarle un cepillo de cerdas suaves para restaurar su esponjosidad. 

Conclusión

En conclusión, no todas las alfombras se pueden lavar en la lavadora. Eso dependerá del tipo de tejido, el tamaño, el peso y qué dice la etiqueta. Si son tejidos delicados es preferible hacerlo a mano, en cambio si se trata de materiales sintéticos estos pueden soportar la máquina. Con estos consejos podrás conservar la vida útil de tus alfombras y tu lavadora. 

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