La cocina, ese espacio sagrado donde se fusionan los aromas, es también el lugar donde los olores y humos pueden volverse inesperadamente intrusivos. Aquí es donde entra en juego la campana extractora de cocina. Pero, ¿alguna vez te has preguntado a qué altura se coloca la campana de la cocina para obtener la mejor ventilación posible? Descubramos la ciencia detrás de la ubicación perfecta para este aparato crucial.
Tabla de contenido
ToggleLa importancia de la ubicación
Antes de sumergirnos en la cuestión de la altura, es crucial comprender por qué la ubicación de las campanas para cocina es tan significativa. La campana de cocina funciona mediante la extracción de humo, vapores y olores del área de cocción. Colocarla estratégicamente maximiza su eficiencia y garantiza una evacuación adecuada de estos elementos no deseados.
¿A qué altura se coloca la campana de la cocina?
La mayoría de los expertos en diseño de cocinas sugieren instalar la campana extractora a una altura que esté al nivel de la cabeza de la persona que cocina con mayor frecuencia en la casa. Esto generalmente se traduce en una altura que oscila entre 60 y 75 centímetros desde la superficie de cocción. Esta posición óptima ayuda a capturar eficazmente los vapores y el humo directamente desde la fuente, antes de que tengan la oportunidad de dispersarse.
Consideraciones de altura para diferentes tipos de cocinas
Cocinas de estilo profesional:
- En cocinas de estilo profesional, donde los chefs caseros disfrutan experimentando con diversas técnicas de cocción, se recomienda una altura ligeramente mayor, alrededor de 75 centímetros desde la superficie de cocción. Esto garantiza una captura efectiva de los humos generados por ollas y sartenes más altas.
Campanas de isla:
- Las campanas de isla, suspendidas sobre encimeras centrales, deben ubicarse a una altura que permita una cobertura eficiente de toda el área de cocción. Aquí, la altura puede variar entre 75 y 90 centímetros según las dimensiones específicas de la campana y la isla.
Consideraciones ergonómicas:
- La ergonomía también desempeña un papel crucial. La campana debe estar lo suficientemente baja como para capturar los vapores y olores, pero no tan baja como para interferir con la visión del cocinero o crear un espacio de trabajo incómodo.
Factores adicionales a considerar
Potencia de extracción:
- La potencia de extracción de la campana también influye en su efectividad. Asegúrate de elegir una campana con la capacidad adecuada para tu cocina, especialmente si tienes una cocina grande o si realizas cocciones intensivas con frecuencia.
Tipo de estufa:
- El tipo de estufa que tengas también afectará la elección de la altura de la campana. Por ejemplo, en el caso de estufas de alto rendimiento o parrillas, puede ser necesario ajustar la altura para garantizar una extracción eficiente.
¿Para qué sirve la campana extractora?
La campana extractora tiene como función principal eliminar humos, olores y vapores generados durante la cocción en la cocina. Este dispositivo mejora la calidad del aire al evacuar contaminantes, evita la acumulación de grasa en superficies y contribuye a mantener un ambiente más saludable y cómodo en el hogar.
¿Cuándo se usa la campana de cocina?
La campana de cocina se utiliza siempre que se realiza cualquier tipo de cocción, ya sea al cocinar alimentos en la estufa o en el horno. Su función es eliminar humos, olores y vapores generados durante la preparación de alimentos, contribuyendo así a mantener un ambiente más limpio, saludable y libre de olores no deseados en la cocina.
¿Qué pasa si no hay campana extractora en la cocina?
Esto puede resultar en la acumulación de humos, olores y vapores derivados de la cocción. Esto no solo afecta la calidad del aire en el entorno doméstico, sino que también puede dar lugar a la deposición de grasa en las superficies cercanas. Además, la falta de ventilación adecuada puede contribuir a la presencia persistente de olores no deseados.
Conclusión
En última instancia, la altura ideal para la campana de tu cocina dependerá de varios factores, incluyendo el diseño de la cocina, el estilo de cocción y tus preferencias personales. La regla general de colocar la campana a la altura de la cabeza es un buen punto de partida, pero es importante ajustar según las necesidades específicas de tu espacio culinario.